La Copa del Rey tuvo definiciones que sorprendieron a los fanáticos. El martes Sevilla tuvo un partido complicado frente al Almería que terminó ganando. El miércoles el Levante pasó raspando a la semifinal y el mismo día el Barcelona casi queda eliminado por el Granada. Para cerrar los cuartos, Betis recibió al Athletic Club y tuvieron una definición emocionante hasta el final.
Tanto Manuel Pellegrini, entrenador del Betis, y García Toral, del Athletic, no se sentian cómodos desde el primer tiempo con el equipo por eso decidieron empezar a realizar los cambios que ayuden a su equipo a conseguir la ventaja.
En el conjunto de Sevilla, Juanmi entró en lugar de Aitor Ruibal y le permitió al equipo una mayor capacidad de juego. El cambio fue tal que el equipo pudo convertir el primer gol del partido a los 84 minutos. La intención ahora era aguantar el partido los pocos minutos que quedaban. De esa forma, el entrenador chileno sacó dos delanteros para armar una línea defensiva más fuerte.
Mientras, el equipo vasco intentaba convertir el empate que le asegure ir al complemento. La salida de Asier Villalibre permitió la entrada de Iñaki Williams. El delantero de 26 años fue el creador de la jugada que le terminó dando el grito de gol a Raúl García a los 94 minutos.
El complemento no tuvo emociones y dejó en evidencia que ninguno de los dos clubes se sentía cómodo en cancha. La definición por penales marcaría quien puede ser más preciso y soportar más la presión. Así lo demostró el Athletic Club que no falló ninguno de sus tiros.
La figura del partido fue Unai Simon que detuvo dos pelotas de Sergio Canales y Juanmi Jiménez. De esta forma, el arquero español le dio el pase a la semifinal a su equipo que podría enfrentar nuevamente al Barcelona como en la final de la Supercopa de España.
