El encuentro entre el Sevilla y el Barcelona era uno de los más esperados de la semana. En la ida, el equipo de Julen Lopetegui había logrado un triunfo por 2 a 0 que le daba esperanzas para convertirse en el finalista de la Copa del Rey.
Pero del otro lado, se preparaban con la intención de conseguir un 3 a 0 que los clasifique a la fase final del torneo español. Y lo consiguieron después de uno de los partidos más peleados del último tiempo. Al Sevilla se le escapó la oportunidad de las manos y eso le causó mucha preocupación al plantel.
La buena noticia que tenían los sevillanos era el regreso de Lucas Ocampos después de su grave lesión el 7 de febrero frente al Getafe. El esguince de grado II podría necesitar hasta dos meses de rehabilitación. Pero su recuperación de 4 semanas fue exitosa y le permitió que pueda estar en el banco de suplentes frente al Barcelona.
Pero después en el partido las cosas no fueron buenas para el blanquirrojo. La lesión del defensor Aleix Vidal preocupó mucho al entrenador español, que decidió reemplazarlo por Jesús Navas. Aún se evalúa cuánto tiempo de recuperación tendrá.
Cuando el partido todavía estaba en un 1 a 0 y el Sevilla estaba logrando la clasificación. La presión del Barcelona hacía que su rival cometiera muchas faltas seguidas. Algo que le costó la expulsión a Fernando después de dos amarillas. Después de eso, los blaugranas pudieron dar vuelta el resultado. Llegando al final, Luuk De Jong también vio la tarjeta roja luego de mucho enojo.
La crisis que causó esta derrota deberá revertirse en poco tiempo ya que el equipo de Andalucía deberá enfrentar el sábado al Elche por la fecha N°26 de La Liga y deberá jugar los octavos de final de la Champions League frente al Borussia Dortmund.
